Sobre Siegfried Wagner
Siegfried Helferich Richard Wagner, nació un 6 de junio de 1869, en la mítica casa suiza de Triebschen, donde Richard Wagner regalara a su esposa Cósima su inmortal "Idilio de Sigfrido", en una época de paz y tranquilidad del compositor. El ambiente que encuentra el niño va a marcar, indudablemente, toda su posterior vida futura. Su padre, en esos años, iba a acabar de gestar sus mayores obras, el estreno del Ring y Parsifal. Viviría su infancia entre Bayreuth e Italia hasta 1883.
Con apenas 14 años, la muerte de su padre en 1883 iba a ser un duro golpe para aquel adolescente que idolatraba al padre/mentor/amigo. A partir de ahí, las relaciones con su madre Cósima se estrecharían al máximo, para seguir adelante con los festivales de Bayreuth, el joven Siegfried iba a educarse entre las tramoyas del teatro e inmerso totalmente en el mundo de la ópera.
Siegfried tuvo como educador musical a Engelbert Humperdinck, el compositor de "Hansel y Gretel", influencia que más tarde iba a verse en su obra. La preparación cultural y artística que tuvo Siegfried Wagner, enmarcada en un ambiente saturado de música, ayudó mucho a su futura carrera: su padre componiendo, los conciertos de su abuelo Listz al piano, las enseñanzas de Humperdinck, innumerables visitas de compositores y cantantes, el Festpielhaus... Todo ello configuró su adolescencia y le encaminó hacia una vía artística completa.
Siegfried con 39 años y estando ya Cósima un tanto achacosa para estar al frente de los festivales y por deseo expreso de ella, designó a su hijo como sucesor del Festpielhaus (como Richard Wagner lo haría con Cósima, y como Siegfried haría más tarde con su esposa Winifred). Al frente del Festpielhaus Siegfried emprendería una gran labor como director musical, director de escena, director de cantantes, programador, y demás. Su labor como director musical fue muy buena, aunque él prefiriese la composición.
En esos años, y para recoger fondos para el Festpielhaus, recorrería toda Europa dando conciertos y dirigiendo óperas. Estuvo en España en 1907, dando una serie de conciertos en el gran Teatro del Liceo, invitado por la Asociación Wagneriana de Barcelona. Dirigiría obras de su padre (Tannhäuser, Holandés, y el Idilio de Sigfrido), de su abuelo (Tasso), y obras propias, obteniendo excelentes críticas.
Siegfried Wagner sacó y creó nuevas producciones de las obras de su padre, gratamente bienvenidas por la crítica y público, que veían en ello una fresca renovación en el quizás un tanto anquilosado Bayreuth. Puso especial énfasis en la coreografía y el coro, transformando globalmente la obra, pero con el profundo respeto a las directrices de su padre. Sus producciones del Holandés de 1901 y el Lohengrin de 1908, con la introducción por primera vez de cicloramas, y los efectos tridimensionales, llevaron a una unánime crítica extraordinaria y una acogida entusiasta por parte de los wagnerianos.
Ello hizo que la afluencia a Bayreuth creciera, todo ello llevado a cabo, además, por una excelente obra de relaciones públicas del propio Siegfried y su esposa Winifred. Bayreuth volvería a resurgir de las cenizas, volvería a enterrarse durante la primera guerra mundial, renacería de nuevo, llegaría a su máximo esplendor en los 30/40 para acabar feneciendo, muriendo, en 1945.
Al igual que su padre, también Siegfried Wagner descubriría nuevos talentos, jóvenes cantantes, en los que confió y apostó fuerte por ellos: Lilly Hafgren-Waag, Alfred von Bary, Heinrich Schultz, Edyth Walker, Allen Hinckley, Gertrude Rennyson, Bennet Challis... Aparte de los ya consagrados que pasarían por el Festpielhaus como Ellen Gullbranson, Walter Soomer, Ernestine Schumann-Heink, Bahr-Mildenburg y otros.
Los directores musicales que pasaron por este período, también fueron muy importantes. Aparte del grandioso Hans Richter, quien se retiraría durante la era Siegfried, dirigieron otros importantes como Karl Muck y Michael Balling.
Siegfried Wagner moriría un 4 de agosto de 1930, muy pocas semanas después que su madre Cósima. Murió de un ataque al corazón repentino, en medio de la vorágine de los Festivales. Murió mientras preparaba el “Tannhäuser”, cuya preparación y trabajo febril, acumulando un stress impresionante, le condujeron a esa súbita y temprana muerte a los 61 años de edad. En 1916, apenas 14 años atrás, habíase casado con la inglesa Winifred Williams, con la que tuviera cuatro hijos: Wieland, Wolfgang, Verena y Friedelind. Siegfried Wagner murió consagrado a la gloria y a la perpetuidad de la obra de su padre y a la realización de un ideal de belleza a través de sus propias obras.